La apertura de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro convocó a más de 20.000 fieles.
Hugo Roldán
El Federal Noticias
CIUDAD DEL VATICANO.- Este martes 24 el Papa Francisco dio inicio al Jubileo ordinario 2025 con la solemne apertura de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro, en una ceremonia que reunió a más de 20.000 fieles en la Plaza San Pedro.
En el contexto de la misa de Nochebuena, el Pontífice explicó el significado de este Año Santo, centrado en la esperanza, y llamó a los cristianos a “levantar la voz contra el mal y las injusticias, especialmente las que afectan a los más pobres”.
Durante la ceremonia, Francisco atravesó el umbral de la Puerta Santa, un gesto cargado de simbolismo que marca el inicio de un tiempo de perdón, reconciliación y renovación espiritual para los cristianos. “Este es el tiempo de la esperanza, que nos invita a transformar el mundo para que sea realmente un tiempo jubilar”, afirmó el Papa. También reiteró su pedido a los gobernantes, para reducir la deuda de los países pobres y abolir la pena de muerte.
En su homilía, el Pontífice vinculó el nacimiento de Jesús con el tema central del Jubileo: la esperanza. “Si Dios viene, aun cuando nuestro corazón se asemeja a un pobre pesebre, entonces podemos decir: la esperanza no ha muerto, está viva y envuelve nuestra vida para siempre”, expresó. Además, instó a los fieles a asumir un compromiso activo contra las injusticias ya construir un mundo donde “reinen la paz y la justicia”.
El Papa destacó que la esperanza cristiana no es pasiva, sino un llamado a la acción. “Nos pide no detenernos en la rutina ni la mediocridad, sino tener la valentía de cambiar lo que no está bien”, señaló. También subrayó la importancia de llevar esperanza “allí donde la vida está herida, en los sueños rotos, en los fracasos y en el sufrimiento”.