
Gabriel Batistuta, ex-jugador de Fútbol, figura de mundiales que hicieron emocionar a fanáticos y no tanto, revolucionó las redes sociales con un mensaje que no pasó desapercibido.
En un tweet expresó: «Se me viene a la mente una pregunta? Mis padres me criaron en un casa de 5 x 3 metros, trabajando, estudiando, confiando en la justicia, me dieron un hogar más amplio. Yo continúe sus ejemplos sacrificándome y respetando al prójimo. FUI UN IDIOTA POR RESPETAR ESTOS IDEALES? «
El ida y vuelta entre los usuarios de la red tuvo expresiones a favor y en contra en un momento político donde genera polémica la discusión del mérito.
Desde la política, hasta expresiones del Papa la opinión pública ha puesto a rodar sus interpretaciones.
“Lo que nos hace evolucionar o crecer no es verdad que sea el mérito, como nos han hecho creer en los últimos años. El más tonto de los ricos tiene más posibilidades que el más inteligente de los pobres. Mientras eso no ocurra, no podemos estar tranquilos con nuestra conciencia”, dijo el Presidente Alberto Fernández en un acto en San Juan.
El Papa Francisco indicó en su liturgia de los domingos: “Quien razona con la lógica humana, o sea, la de los méritos adquiridos con la propia habilidad, de primero pasa a último”.
Así la meritocracia supone que las capacidades de cada individuo son tenidas en cuenta a la hora de definir su lugar y sus derechos dentro de su contexto social, político y económico. Esto supone que sus logros o méritos personales, laborales, financieros o académicos son la base para su desarrollo social.
Lo cierto es que muchos casos, allí radica la discusión, el logro de esos «méritos» viene de la mano del esfuerzo aún en condiciones desfavorables.