150 personas viajaron ésta semana a las islas, luego 4 años sin vuelos. La mayoría lo hizo por primera vez.
Hugo Roldán El Federal Noticias
La madre un soldado muerto en el conflicto, estuvo presente a pesar de su situación.
BUENOS AIRES.- El pasado miércoles 4 de diciembre, retomaron los vuelos al archipiélago, después de un «parate» de 4 años. Un contingente compuesto 150 familiares de caídos durante la guerra de 1982, pudieron viajar a las Islas Malvinas, para honrar a los héroes que no pudieron regresar a sus hogares.
Entre los viajeros hubo padres, madres, hijos, nietos y hermanos, que pudieron visitar a sus seres queridos que descansan en el Cementerio de Darwin.
Algunos familiares llevaron flores artificiales (para soportar los fuertes vientos) y otros banderas
Emoción, dolor, lagrimas y las esperanzas de volver siempre a visitar a los caídos.
Las limitaciones motrices quedaron de lado en la visita.
Bajo el amparo de la Virgen de Luján, los familiares escucharon la homilía.
El Cementerio de Darwin es acompañado por la soledad, el frío y los vientos constantes.
El nieto se tatuó la imagen de una mamá sentada frente a la tumba de su hijo y éste, vestido de soldado, arrodillado junto a ella.
El rosario resiste el duro clima de la isla, en la cruz de una tumba.
Todos unidos como una gran familia.
Pasaron 42 años, y el dolor sigue latente.
Los familiares en pleno vuelo a las islas.
Los adultos mayores fueron de la partida, previa autorización médica.
Para llegar al cementerio hay que realizar un viaje de media hora desde el aeropuerto.La imagen representa el dolor de todo el pueblo argentino.
La visita se realizó gracias al respaldo del empresario Eduardo Eurnekian (Fotos Matías Arbotto)