La crisis económica y las restricciones estrictas impuestas por el Gobierno hasta el 30 de mayo, hacen que los comerciantes del Alto Valle, además de estallar de bronca y rebelarse antes las nuevas medida, agudicen la creatividad e ingenio, para ganarse unos pesos y poder sobrevivir en estos tiempos de pandemia y falta de políticas sanitarias efectivas, contra el coronavirus.
«Alto Valle: alquilo costillar para selfie una persona $200, hasta seis amigos $600», es la frase que resalta una pizarra, en la la esquina de las calles San Martín y Collón Cura. La iniciativa, la tuvo el dueño del almacén Alto Valle.
Teniendo en cuenta que el kilo de carne salen entre 700 y 800 pesos el kilo y el costillar pesa 10 kilos, estamos hablando de unos 7 a 8 mil pesos. Por eso mismo, en tiempos de Covid, con la inflación en alta y los precios por las nubes, la «promoción» para estar aunque sea cerca de un costillar, es tentadora.
Luego de que el Presidente Alberto Fernández anunciara una serie de medidas que comenzaron este sábado 22 de mayo, con el fin de detener la segunda ola de contagios del coronavirus generó gran malestar entre los comerciantes y gastronómicos en Neuquén y Río Negro.
Las manifestaciones de desagrado se hicieron sentir: en Cipolletti se concentraron frente a la casa del intendente Claudio Di Tella, y en la Capital neuquina, la calle Leloir fue escenario de una protesta de empleados de un tradicional café, que se resistió a cerrar su puertas para venta al público.
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