El oficialismo quiere evitar que se rechace el decreto 846 que otorgó facultades al Ejecutivo para reestructurar la deuda sin pasar por el Congreso.

BUENOS AIRES.- El gobierno Nacional enfrenta un nuevo desafío por el quórum en la Cámara Baja e intensifica tensiones sobre los gobernadores para impedir una sesión especial donde se rechazaría el decreto 846, que autorizó al gobierno a reestructurar la deuda sin la aprobación del Congreso.
Ante esto, el Ejecutivo advirtió a los mandatarios provinciales con retirar el Presupuesto, que implicaría la suspensión de los fondos adicionales.
La estrategia es conseguir que ciertos miembros apoyen al gobierno, en especial representantes de Catamarca, La Rioja y Tucumán. Algunos diputados ya mostraron su disposición de colaborar, aunque otros, como los de Córdoba y el bloque del PRO, adoptaron una postura de rechazo al quórum.
El objetivo de la oposición es frenar la maniobra del Estado Nacional de reestructurar la deuda. La sesión también podría abrir camino a una votación en el Senado, donde la oposición es más fuerte.