La denuncia judicial sostiene que hubo acuerdos para entrenamientos y capacitación en explosivos, por parte de la agrupación conducida por Firmenich y la OLP.
Hugo Roldán
El Federal Noticias
La Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia pidió que los atentados y crímenes de los Montoneros sean declarados delitos de lesa humanidad e imprescriptibles, revela conexiones de la agrupación guerrillera con con organizaciones palestinas.
La denuncia fue radicada en la jornada del lunes, en el juzgado de la Dra. María Servini. La demanda sostiene que la escuela de cuadros de los Montoneros, dependiente del Comando Táctico, se ocupaba de la formación de los grupos TEA (tropas especiales de agitación) y TEI (tropas especiales de infantería). En referencia a estos últimos, se advierte que “estaban entrenados en técnicas de tiro, explosivos y táctica militar, adiestrados en campos de instrucción situados en Beirut (Líbano) y Tahl (Siria), en virtud de convenios celebrados entre Montoneros y Al Fatah en 1978″.
La acusación está basada en pruebas de expedientes judiciales y distintas publicaciones; señala la existencia de un pacto celebrado por la cúpula de Montoneros, conducida por Mario Firmenich, con el extinto líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasser Arafat, y con Abu Jihad, cuyo nombre verdadero era Khalil al Wazir, líder del brazo armado Al Fatah.
Esos lazos se habrían activado como preparación para la llamada «Contraofensiva», como se denominó la etapa de los atentados que el grupo armado argentino intentó perpetrar en el país a partir de 1979.
Como respaldo citan fragmentos de la causa judicial “Scagliusi, Claudio Gustavo y otros s/privación ilegal de la libertad”, los denunciantes agregan que los detalles de ese acuerdo fueron revelados por varias publicaciones, entre las que cita el libro “Montoneros, conexión local de los atentados a la embajada de Israel y la AMIA”, de George Chaya, y “Montoneros y Palestina”, de Pablo Robledo.
Las relaciones entre ambas organizaciones databan de 1973, pero solo se hicieron públicas en 1977, luego de una reunión entre Firmenich y Fernando Vaca Narvaja con Arafat, en Beirut.
El acuerdo incluía cooperación en materia de documentos, logística y objetivos de cada organización y un capítulo militar. Montoneros debía aportar transferencia de tecnología para el desarrollo, construcción e instalación de una fábrica de explosivos plásticos y proveer un técnico químico para dirigirla.
A cambio, Al Fatah se comprometió a ceder armamento de origen soviético, lanza cohetes RPG7 y entrenamiento militar de los pelotones de infantería, que luego protagonizarían la llamada “Contraofensiva Estratégica” de Montoneros.
Se destaca también en la denuncia que Imad Fayez Mougnieh, jefe de inteligencia de Hezbolla y uno de los acusados por el atentado a la AMIA, habría sido entrenador de grupos de guerrilleros, de acuerdo con una declaración testimonial recepcionada en México.
Un punto a tener en cuenta involucra a Nicaragua. Se afirma que el «dictador» Daniel Ortega se benefició con los fondos obtenidos por Montoneros a través del secuestro de los hermanos Born, considerado el rescate más alto de la historia de los secuestros extorsivos”.
El nombre de Emilio Pérsico también figura: es uno de los que se entrenó en las bases de Siria y el Líbano para la preparación de la Contraofensiva. Añaden que intervino en el homicidio de Francisco Soldati y habría participado también en el atentado a Guillermo Walter Klein y su familia.