
La muerte de un médico jefe de terapia intensiva conmovió a toda la comunidad chaqueña que vive con gran dolor estos días de pandemia en el tercer distrito de mayor cantidad de casos del país.
Miguel Duré, de 53 años, era jefe del área en el Hospital Perrando, el centro de salud más importante de la provincia. Tras estar 23 días internado falleció esta madrugada por un cuadro de coronavirus.
El médico sufría hipertensión y era paciente de riesgo. Desde hace semanas contaba con una insuficiencia respiratoria grave con falla renal, lo que obligaba a una terapia de diálisis.
Ante el grave cuadro, Duré fue el primer paciente del Hospital Perrando que recibió plasma de convaleciente para el tratamiento de la COVID-19. En un comienzo la respuesta fue satisfactoria pero su cuerpo tuvo diversas fallas orgánicas que empeoraron su cuadro.
En un video que se compartió por redes sociales, el cortejo fúnebre que trasladaba los restos de Duré muestra la calurosa despedida que le dedicaron sus colegas y amigos. Ubicados en dos grandes filas alrededor de la calle, cientos de profesionales y auxiliares del centro de salud fueron espontáneamente a la salida de la morgue del hospital para unirse en un sonoro aplauso, mientras el coche llevaba el cuerpo hacia su destino final.
“Con profundo dolor despedimos a un gran colega, un héroe sin capa”, anunció la noticia la Gremial Médica de Chaco en su cuenta oficial.

