El Presidente con menos autocrítica de la historia, ya se queda sin responsables por la pésima gestión.
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BUENOS AIRES.- La culpa siempre fue del otro. Alberto Fernández no admitió, en los casi cuatro años de gestión, ningún tipo de autocrítica sobre su pésimo desempeño como presidente. Primero fue el macrismo, luego la pandemia, la guerra de Rusia y Ucrania, la sequía y ahora la oposición.
Fernández acusó a la oposición de impulsar la corrida cambiaria que ubica al dólar paralelo a $495, y afirmó que «cuando van al exterior piden que corten el crédito y que exijan más ajuste sobre el pueblo». Lo hizo en el marco de una declaración conjunta con el presidente de Rumania, Klaus Lohannis, tras un encuentro bilateral.
«Lo que dice Sergio Chodos es absolutamente cierto y es una práctica permanente de la derecha argentina», sostuvo el mandatario en referencia al planteo que hizo el representante argentino ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) al respecto.
Asimismo, describió: «Primero, instalan rumores a la mañana, operan durante todo el día y cuando termina la tarde retiran su rentabilidad del mercado cambiario y lastiman de ese modo el ahorro de la mayoría de los argentinos. Siempre han hecho lo mismo».
«Cuando van al exterior piden que nos corten el crédito y que exijan más ajuste sobre el pueblo», agregó.
Los dichos del mandatario van en la tónica con lo expuesto por Chodos, quien tildó de “antipatrias» a tres economistas del “gobierno anterior” al sostener que le habrían pedido a funcionarios del organismo multilateral que no brinden asistencia a la Argentina hasta que asuma un nuevo gobierno.
«Siempre han hecho lo mismo», insistió el jefe de Estado al tiempo que aseguró que con el ministro de Economía, Sergio Massa, trabajan en una estrategia para frenar la corrida, y en «educar» a la oposición. «Estamos trabajando, muy consustanciados, vamos a superar y a tratar de educarlos para ver si alguna vez piensan en los que pueblan y trabajan en este país y en los que han quedado sumidos en la pobreza antes de pensar en sus negocios e intereses políticos», enfatizó el mandatario.
Por otra parte, ratificó al titular del Banco Central (BCRA), Miguel Ángel Pesce al señalar que «nunca estuvo en discusión» su tarea al frente de la institución, y desmintió que el FMI haya negado adelantar los fondos correspondientes al segundo semestre.
El presidente de Rumania llegó pasadas las 11 a Casa Rosada para protagonizar una bilateral que se extendió por una hora. A su término, ambos revelaron que abordaron estrategias para avanzar en un acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur.
Otro de los temas centrales fue el impacto de la guerra entre Ucrania y Rusia, y las claves para avanzar en instalar un canal de diálogo entre las partes en pugna. «En cuanto a la guerra hemos hablado tal vez la mitad del encuentro. Ambos estamos muy preocupados y condenamos la agresión», planteó Iohannis.
«Hay que buscar el fin de la Guerra y empezar las negociaciones entre las partes. Es un problema global y no solo europeo como algunos dicen erróneamente», continuó el jefe de Estado.
En ese sentido, Alberto Fernández remarcó que apuesta a que se avance en aspectos menos controversiales del intercambio, como en ciencia y tecnología.