
LOMAS DE ZAMORA – Luego de 7 meses y con una cuarentena que se reitera en anuncios cada 15 días, reabrió La Salada con protocolos de seguridad, se supone que de manera intercalada para desplegar sus puestos.
Desde Lomas de Zamora donde se ubica la feria, informaron que «El Municipio habilitó la apertura por puestos pares un día e impares otro día, para abrir con la capacidad al 50 por ciento. Por la infraestructura de la feria, se dividirán dos grupos que abrirán alternadamente desde el día de la apertura”, detalla un comunicado difundido días atrás por la organización.
Si bien se proponen corredores seguros con uso de alcohol y sanitizante su capacidad es tan amplia que la distribución por día no reduce la circulación de gente y la aglomeración.
Frente a este panorama hubieron voces críticas en contraposición con la falta de avances en protocolos que permitan reiniciar actividades en términos educativos, por ejemplo.
Pensar en el distanciamiento social en La Salada parece ser poco probable sobre todo por ser un lugar de venta de productos que abastecen al país entero.

En tal sentido las condiciones de una escuela tienen mayores alternativas de seguridad y aplicación de protocolos realmente viables.
La polémica no se hizo esperar y el reclamo se trasladó a las redes sociales y medios de comunicación, sobre todo para evidenciar que un gran sector de la educación semi-privada y privada pasa un momento extremadamente crítico desde lo económico que la política no atiende.
Con respecto a lo educativo, la falta de presencialidad evidencia efectos devastadores en los índices de escolaridad para miles de niños y adolescentes, lo que ensanchará aún más la brecha de desigualdad y pobreza en el país.
