El INDEC señaló que la capital riojana sufre de un 17,1% de subocupación y un 15% de subocupación demandante -las más altas del país-, mientras que la pobreza alcanza al 66,4% de la población -la tercera del país detrás de Resistencia (Chaco) y Formosa-, y la indigencia al 15% -por debajo del promedio nacional y regional-.
Jorge Brizuela Cáceres
El Federal Noticias
Los reportes estadísticos de las últimas semanas provistos por la Encuesta Permanente de Hogares dejan en evidencia lo que muchos riojanos saben por experiencia y sentido común: somos de los más pobres del país. La pobreza, es decir, la dificultad de alcanzar los ingresos para solventar la Canasta Básica Familiar (o Total) valuada en junio en $ 809.000 para nuestra región, mientras que la indigencia, es decir, la imposibilidad de pagar la Canasta Básica de Alimentos, que para una familia tipo fue de 368.000 para la misma fecha. Todos los datos corresponden al Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), que dirige el economista Marco Lavagna desde 2019, ex diputado nacional por el Frente Renovador.
Los datos indican que el 66,4% de los habitantes de la capital riojana, es decir unas 156.893 personas, son pobres. Este índice alcanzaba al 52,9% en diciembre de 2023, y al 41,7% en junio del mismo año. Por otra parte, un 15% de los capitalinos están bajo la línea de indigencia, lo que significa 35.334 personas. En 2023 este índice era del 18,1% (diciembre) y del 11,9% (junio).
Por otra parte, datos del mercado del trabajo para el segundo trimestre de este año indican que la subocupación en el conglomerado urbano La Rioja es del 17,1%, mientras que la subocupación demandante alcanza el 15%. La misma fuente informa que la desocupación alcanza al 6,5% de Población Económicamente Activa (45,7% del total). En términos cuantitativos hablamos de 7 mil desocupados, 21 mil ocupados demandantes de empleo y 18 mil subocupados.
Según el INDEC, la población subocupada son las personas ocupadas que trabajan menos de 35 horas semanales por causas involuntarias y que están dispuestas a trabajar más horas, mientras que la subocupada demandante: es la que además busca activamente otra ocupación, mientras que los ocupados demandantes de empleo sonlos que trabajan hasta 45 horas semanales, y aún así buscan más empleo.
Algunos economistas coinciden en que estos últimos índices son a causa de los bajos salarios del sector público, especialmente en áreas como educación y salud, Otro factor importante que explica los graves resultados en el territorio del gobernador Ricardo Quintela en la baja oferta de empleo privado, a menos que sea autogestionado (emprendedores y monotributistas), lo cual se dificulta por las escasas líneas de crédito productivo.-