Los hechos sucedieron durante la presidencia de Néstor Kirchner. Están procesados Julio De Vido, Julio López y empresarios vinculados a gasoductos.
Hugo Roldán
El Federal Noticias
BUENOS AIRES.- Casi dos décadas después de que se denunciara el primer escándalo de corrupción del kirchnerismo, en la mañana de hoy, comenzó en el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°4 de la CABA el juicio por el «Caso Skanska», vinculado a la adjudicación de gasoductos en «La Argentina». La causa se demoró porque inicialmente fue archivada y luego reabierta por la Corte Suprema de Justicia.
Los principales acusados son el ex-ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, y el secretario de Obras Públicas, José López. Él primero asistió personalmente a la sala AMIA, mientras que el segundo adujo problemas de salud y siguió la sesión virtualmente, según informó la agencia Noticias Argentinas.
Por la causa de la Tragedia de Once, De Vido está condenado a 5 años y 8 meses de cárcel e inhabilitación especial perpetua para ocupar cargos públicos, al encontrarlo partícipe necesario del delito de administración fraudulenta. Además, está procesado en la causa de los Cuadernos de las Coimas y otras.
En el caso Skanska, se juzga la presunta defraudación por administración fraudulenta en perjuicio del Estado Nacional y el posible cohecho en relación a la contratación y realización del Gasoducto Norte y Sur entre 2004 y 2006.
En este juicio, también están procesados el exsecretario de Obras Públicas José López; el ex-gerente del Fideicomiso Banco Nación Néstor Alberto Ulloa; 9 directivos de la compañía Skanska y 17 representantes de otras empresas que intervinieron en los proyectos de gasoductos durante el gobierno de Néstor Kirchner.
En el debate, que está a cargo de los jueces Jorge Gorini, Néstor Costabel y la jueza María Gabriela López Iñiguez, el Ministerio Público Fiscal estará representado por el titular de la Fiscalía General N°2 ante los TOF porteños, Abel Córdoba. Se espera que durante el desarrollo del juicio declaren 90 testigos.
Los ex-funcionarios públicos que llegaron a juicio fueron procesados por el Juez Federal Sebastián Casanello a instancias del fiscal Carlos Stornelli, como coautores del delito de “administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública en concurso ideal con cohecho pasivo”.
A los directivos de Skanska Mario Piantoni, Gustavo Vago, Ignacio de Uribelarrea, Javier Azcárate, Héctor Osvaldo Obregón, Eduardo Varni, Juan Carlos Bos, Alejandro Gerlero y Roberto Antonio Zareba se les atribuyó una participación en el delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública y se los señaló como coautores del delito de cohecho.
De acuerdo al requerimiento de elevación a juicio, entre noviembre de 2004 y abril de 2006, se habrían pagado coimas y sobreprecios en el marco de las contrataciones para expandir la capacidad de transporte de gas natural, lo que comprendía la instalación de gasoductos en el sistema norte (licenciataria TGN) y en el sistema sur (licenciataria TGS); la incorporación de potencia de comprensión, el acondicionamiento de las plantas compresoras existentes y la construcción de una nueva planta compresora
Esos pagos habrían sido instrumentados por directivos de la empresa Skanska a funcionarios públicos que intervinieron en ese procedimiento administrativo y, para justificar esos pagos y darle un marco legal, aunque aparente, Skanska habría simulado operaciones comerciales con 24 empresas.